Usar un estropajo ecológico y natural, como el humilde
estropajo de esparto de toda la vida, puede parecer un gesto pequeño y sin importancia a la hora de enfrentar un problema de las dimensiones del cambio climático a escala global. Pero, si millones de hogares de todo el mundo comienzan a usar
productos ecológicos de forma cotidiana, la repercusión de esos millones de pequeños gestos no será, por contra, pequeña.
Afirmar que "la revolución" comienza en tu cocina sería demaiado presuntuoso tal vez, pero el uso de
estropajos naturales es otra pequeña piedra de una gran construcción.
Estropajos y esponjas biodegradables, elaborados con fibras vegetales, como la fibra de coco o la
luffa, a partir de materiales reciclados,
celulosa o, incluso, de silicona. Ahora ya tienes
alternativas ecológicas al estropajo de plástico para fregar los platos.
Puede que seas escéptica/o acerca de una
esponja para lavar platos ecológica sin plástico, especialmente si no lavas inmediatamente después de comer o cenar y dejas que la comida se reseque. Cuando te enfrentas a unos espaguetis secos pegados a un plato cubierto de salsa de tomate necesitas un estropajo capaz de hacer su trabajo.
¿Es posible que un estropajo ecológico, un cepillo de fibras, o una esponja ecologica para fregar platos, hecho de materiales 100% naturales, pueda hacerlo?
Si echas un vistazo a los artículos siguientes descubrirás que sí.
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EL PROBLEMA DE LAS ESPONJAS CONVENCIONALES
Microplásticos
A diferencia de los estropajos naturales, esas esponjas amarillas y verdes que, probablemente, has estado usando durante toda tu vida están hechas de plástico. De modo que, cada vez que usas esa esponja pequeña y barata, sin saberlo, estás arrojando pequeñas partículas de plástico en el mar.
Esto se debe a que los sistemas de filtración de agua no son lo suficientemente eficaces para filtrarlos. Se estima que hay 1,4 millones de billones de microfibras en el océano. No queremos ni saber cuántos ceros son esos.
La parte más aterradora es que otros productos químicos peligrosos, como los pesticidas, que también están presentes en el agua, son absorbidos por las microfibras, haciéndolas altamente tóxicas… lo que nos lleva al siguiente punto.
Pescado = comida
Estos pequeños y furtivos microplásticos, que apenas son visibles a simple vista, son tragados por criaturas marinas. Los químicos tóxicos que han sido absorbidos eventualmente causan daño hepático en peces, aves y otros animales salvajes costeros.
Los científicos han encontrado microfibras en 114 tipos de peces, la mitad de los cuales son consumidos por humanos y están tratando de averiguar qué repercusión tiene para nuestra salud, pero los estudios de esta naturaleza llevan mucho tiempo.
Residuos en vertederos
Aunque un estropajo ecologico no es excesivamente caro, estas esponjas convencionales son increíblemente mucho más baratas y se consideran desechables. ¡Se escuchan historias de terror sobre personas que usan una sola esponja todos los días para evitar los gérmenes!
Lamentablemente, no son biodegradables. Ni siquiera podemos imaginar cuántas esponjas sintéticas deben estar viviendo dentro de los vertederos o contaminando los océanos.
Afortunadamente hoy en día hay muchas opciones que son biodegradables y más amigables con el medio ambiente. Existen opciones naturalmente antibacterianas e incluso esponjas sostenibles para aquellos que aman las esponjas de plástico y prefieren una alternativa ecológica sin tener que renunciar a ellas.
Combustibles fósiles
Las corporaciones de petróleo crudo (y otros combustibles fósiles) son las que más contribuyen al cambio climático. El petróleo se utiliza para fabricar plástico y otros materiales sintéticos.
Esto no solo es catastrófico para el planeta, por ejempo el derrame de petróleo en los mares y océanos, o el daño colateral del fracking en busca de petróleo, sino que las codiciosas empresas también contribuyen al abusos de los derechos humanos, como Shell, que es responsable de causar genocidio ambiental en Nigeria.
